miércoles, 15 de septiembre de 2010

PARA LA REFLEXIÓN

Rosario 11 de septiembre de 2008 bazan

lunes, 13 de septiembre de 2010

Juegos cooperativos

http://www.efdeportes.com/efd9/jue9.htm

Educación

Educación
Por: William Ospina

Leído en la clausura del Seminario sobre Metas 2021 de la Organización de Estados Iberoamericanos celebrado en Colombia

Una cosa es la educación y otra es el sistema escolar. Por momentos coinciden, pero la educación comienza mucho antes de la llegada de los niños a las aulas. Por eso tiene tanto sentido la frase de Bernard Shaw: “Mi educación se vio interrumpida con mi ingreso a la escuela”.

La primera forma de enseñanza es el ejemplo, y lo más importante es la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace. Kafka veía con alarma que su padre les prohibía a los hijos exactamente todo aquello que él se permitía hacer en la mesa y en la vida, y de allí nació su crítica espantada a las arbitrariedades de la patria potestad. Nuestros primeros educadores son padres, parientes, amigos, gentes desconocidas en las calles, autoridades, gobernantes, medios de comunicación.

A menudo, cuando un niño llega a la escuela, los rasgos fundamentales de su educación y acaso de su existencia ya están trazados. Y así como existen influencias también existen vocaciones, aquello que en la fisiología y la sensibilidad nos predispone a determinados temas y disciplinas. Por eso es tan importante que desde la primera etapa de la vida se nos escuche y no sólo se nos enseñe. Ver a un niño como un cántaro vacío que hay que llenar de cosas, de información, de deberes y rigores, es olvidar que en cada instrumento existe ya la pauta de un sonido, que hay maderos que contienen canoas y maderos que contiene guitarras.

Un buen maestro no es sólo quien sabe hablar sino sobre todo quien sabe escuchar, el que descubre qué potro está encerrado en el bloque de mármol. Y por eso es tan nociva la sobreexposición a los medios de comunicación, que siempre hablan y nunca escuchan, y que sobre todo son incapaces de escuchar lo tácito, lo que todos decimos sin hablar.

El aprendizaje de nuestro propio valor, de nuestra propia dignidad, es lo primero. Nunca llegará a saber nada el que no sabe de sus propios derechos y posibilidades. Por eso la educación que tiraniza y que irrespeta, la educación que masifica, es fuente de todos los fracasos y todas las violencias. Por ello la educación no es simplemente la solución a los problemas de la sociedad: a veces es el problema. Puede educarnos en la exclusión, en el racismo, en el clasismo, en las manías de la estratificación social. Sólo cierto tipo de educación forma realmente individuos y forma ciudadanos.

Es ingenuo pretender que si el niño llega a la escuela ya hemos cumplido nuestros deberes con él: también hay que preguntarse qué escuela es esa y en qué tipo de sociedad está levantada. Acabo de leer el informe que una revista trae esta semana, sobre niños muertos de miedo de tener que ir a la escuela, porque para llegar tienen que atravesar entre las balas. El país es una gran escuela en la que crecen las escuelas pequeñas, y si todo es un campo de guerra, donde la única oferta de empleo para los muchachos es la violencia pagada por todos los ejércitos, de poco sirve que en la escuela se alternen los discursos de Platón y de Cristo.

Lo primero que tenemos que aprender es a no hacer trampa, a respetar a los otros, a respetarnos a nosotros mismos, a tener un sentido de comunidad, a apreciar el valor del trabajo. Sentirnos pertenecer a una memoria, a un territorio, a un sistema de valores. ¿Están nuestra sociedad y nuestra escuela formándonos en esos principios? Que la gente haya tenido una costosa educación no significa que sea bien educada: parte de la violencia que padecemos no es fruto de seres iletrados; basta ver los foros de los periódicos para entender que hay gente que escribe con odio y con violencia; uno de los mayores males de nuestras sociedades, la corrupción, suele ser obra de gentes que lo han tenido todo, incluidos títulos universitarios.

He dicho que primero aprendemos por el ejemplo. En segundo lugar, creo que aprendemos por el diálogo. Éste no sólo nos inicia en el conocimiento de que existe una verdad, sino en la conciencia de que podemos interrogarla, matizarla, atrever opiniones. El diálogo estimula la curiosidad y el deseo de saber. Y allí podemos percibir la importancia de las artes en la formación de nuestra sensibilidad, de nuestra honda humanidad. Enmanuel Kant dejó escrito que la más importante de las artes es la conversación. Porque en ella intervienen la memoria, la inteligencia, el carácter, la sensibilidad, el conocimiento de los otros, la imaginación. En ese arte los amigos son nuestros maestros, y los maestros son nuestros amigos.

En tercer lugar está, por supuesto, la lectura. Los planes de alfabetización a veces olvidan que la lectura supone por lo menos tres elementos: el desciframiento, la comprensión y la crítica. Conozco personas que pueden deletrear, descifrar un texto y que sin embargo no lo comprenden. Basta oír a alguien leer en voz alta para saber si está comprendiendo lo que lee. Y cuando hablo de comprensión hablo a la vez de entender un texto y de sentirlo.

Hay personas que me han confesado que entienden un poema cuando lo leen, pero que sólo lo sienten cuando escuchan a otra persona diciéndolo. Porque hay una carga de emoción en los textos, y no sólo en los textos poéticos, un contenido de belleza, de sentimiento, de pasión, de deleite o de maravilla, que va más allá del mero entender, que exige la participación de las emociones, que está gobernado por el ritmo y si se quiere por la música.

Finalmente, la lectura verdadera tiene que ser capaz de crítica, de dialogar con el texto, de atrever objeciones, de construir a partir de él opiniones propias, otras alternativas, otros sentidos y desenlaces. ¿En qué parte de la educación formal está incluida la formación de la sensibilidad y del criterio? Queremos una educación que nos haga buenos profesionales y buenos operarios, pero sobre todo necesitamos una que nos haga valientes ciudadanos, y lúcidos seres humanos. ¿Quién nos enseña a tener opiniones propias, serias, razonadas? ¿Quién nos educa para no ser veletas bajo la manipulación de tantos poderes e intereses que hoy controlan el mundo? ¿Cómo formar parte de una civilización y no de un reducto de intereses o de un campamento de supervivencia? ¿Cómo pensar y vivir en función del engrandecimiento de una sociedad y no de la defensa mezquina y a veces suicida de un mero proyecto personal o gremial?

A partir de cierto momento la educación sólo puede ser activa. Compartir conocimientos, investigar, crear, hacer. La investigación, la experimentación y el trabajo son altos instrumentos, pero sólo pueden servirnos si esa primera educación que nos hace humanos y ciudadanos se ha cumplido con coherencia y con profunda responsabilidad.

William Ospina

Fuente El Espectador

La teoría

DEL TRABAJO EN GRUPO AL TRABAJO COOPERATIVO

APRENDIZAJE COOPERATIVO

El aprendizaje cooperativo • El aprendizaje cooperativo se basa en la construcción participativa del conocimiento y agrupa diferentes metodologías, desde técnicas concretas en el aula hasta marcos de enseñanza y actitudes conceptuales (Trujillo, 2002). • El aprendizaje cooperativo se define como un proceso que enfatiza el aprendizaje y los esfuerzos de cooperación en grupo para el logro de tareas específicas.

Un poco mas sobre el Aprendizaje Cooperativo

¿Què es el aprendizaje cooperativo?

“El aprendizaje cooperativo es utilizar con una finalidad didáctica el trabajo en equipos reducidos de alumnos para aprovechar al máximo la interacción entre ellos con la finalidad de que todos los miembros de un equipo aprendan los contenidos, y aprendan, además, a trabajar en equipo. Los miembros de un equipo de aprendizaje cooperativo tienen una doble responsabilidad: aprender ellos lo que el profesor les enseña y contribuir a qué lo aprendan también sus compañeros de equipo.


Y los equipos de aprendizaje cooperativo tienen una doble finalidad: aprender los contenidos académicos, y aprender a trabajar en equipo, como un contenido académico más. Es decir, cooperar para aprender y aprender a cooperar”... Hay que ir más allá del “trabajo en equipo” para hacer algo juntos (repartirnos el trabajo y hacer algo entre todos, de modo que el resultado sea sólo la simple yuxtaposición de diferentes trabajos individuales).


Una cosa es hacer de vez en cuando un “trabajo en equipo”, y otra cosa muy distinta es tener estructurado el grupo —de una forma más o menos permanente- en “equipos de trabajo”. Tenemos que lograr que nuestros estudiantes formen “equipos de trabajo” para aprender juntos (para que se ayuden unos a otros a aprender todos).

Pere Pujolás

VIDEO APRENDIZAJE


UNA EXPERIENCIA DE LA PRACTICA PEDAGÓGICA DONDE SE PONE EN MARCHA ALGUNOS DE LOS PRINCIPIOS DEL APRENDIZAJE COOPERATIVO

viernes, 10 de septiembre de 2010

Elementos básicos del aprendizaje cooperativo y la colaboración

Elementos básicos del aprendizaje cooperativo y la colaboración

A. Interdependencia positiva

La interdependencia positiva es el elemento central del aprendizaje cooperativo, debido a que reúne un conjunto de otras características, que facilitan el trabajo grupal en relación a su organización y funcionamiento. Se distinguen en la interdependencia positiva 5 conceptos básicos:

Interdependencia de metas. Ésta se refiere a la existencia de objetivos que sean definidos y compartidos por todos los miembros del grupo. El profesor que desee formar un grupo de aprendizaje cooperativo, deberá poner especial atención en que el grupo de alumnos compartan el o los objetivos definidos para su trabajo. En la enseñanza tradicional habitualmente los alumnos desconocen los objetivos de la clase que están escuchando, situación que se contrapone a lo que plantea la Reforma Educacional. El alumno no comprende la razón de su aprendizaje y consecuentemente no tiene significado para él, no sintiendo como propio lo que está estudiando o lo que se le es está enseñando.

Interdependencia de tareas. Esta característica consiste en la división de las labores que desarrollan los alumnos al interior de un grupo de aprendizaje cooperativo. Se rompe así lo comúnmente usado, una distribución standard de actividades dentro de un grupo curso. La división de labores o tareas al interior de un grupo de aprendizaje cooperativo, permite al grupo ser más eficiente en el desarrollo de sus actividades en tanto cada quien puede hacer lo suyo, guiado por el profesor, teniendo siempre presente que su aporte personal es en beneficio del grupo y de los objetivos acordados entre todos los miembros de este. Cada estudiante aporta desde él mismo, reforzando con ello su autoestima y la percepción de sí como una persona útil y capaz.

Interdependencia de recursos. Se refiere a que el profesor hace una división de los materiales o de la información que se le dará al grupo en la actividad diseñada, por ejemplo, si el grupo debe elaborar un póster sobre el mes del mar, un niño administrará la tijera, otro el pegamento, otro las revistas a recortar, etc. Se estimula a que los alumnos necesariamente deban relacionarse e interactuar unos con otros para desarrollar la tarea y lograr los objetivos acordados. Se genera dependencia entre los niños que les permite la búsqueda del otro para el desarrollo de la tarea, fomentándose en los alumnos la capacidad de planificar y coordinar su trabajo.

Interdependencia de roles. Consiste en asignar diferentes papeles o roles entre los alumnos que forman un grupo de aprendizaje cooperativo. Por ejemplo, se les solicita a un grupo de alumnos editar un cuento en el procesador de texto, en donde el profesor le pide a un niño que controle el tiempo de uso del teclado, a otro le pide que supervise que todos participen, un tercero tendrá por misión moderar y coordinar la ejecución de la tarea, otro tendrá por misión velar por la participación de todos los miembros del grupo, etc. Esta característica

permite que el grupo se autocontrole en relación a los turnos de trabajo, tiempos de ejecución de una tarea, uso equitativo de materiales, entre otros. Por otra parte, la asignación de roles diferenciados a los niños permite explorar la habilidades de cada estudiante y es útil para que el profesor pueda ir conociendo las potencialidades de sus alumnos de tal modo que en el futuro se pueden potenciar las características de los niños al máximo.

Interdependencia de premios. Consiste en otorgar refuerzos o recompensas conjuntas a todos los integrantes del grupo, es decir un premio al grupo. Se intenta que los alumnos sientan que el grupo en su totalidad fue el que tuvo éxito en la tarea, y que ese éxito fue producto del esfuerzo de cada uno. Este “éxito grupal”, desarrolla en los estudiantes sentimientos de pertenencia y de apoyo colectivo, reforzándose la idea de que trabajar en grupo es efectivo.

B. Interacción cara a cara

La interdependencia positiva en un grupo de aprendizaje cooperativo no es mágica en sí misma. Son las formas de interacción y de intercambio verbal entre las personas del grupo, movidas por la interdependencia positiva, las que afectan los resultados de aprendizaje. Es así como el contacto cara a cara entre los alumnos participantes de un grupo, es el que permite acordar las metas a lograr, permite desarrollar roles y estimular o frenar actitudes de sus pares en el desarrollo de las tareas. Por último, el alumno aprende que de ese compañero con el que interactúa día a día puede aprender o el mismo le puede enseñar, apoyarse y apoyar.

C. Contribución individual

Esta característica se refiere a la capacidad de dominar y ejecutar la parte del trabajo de la cual el estudiante se ha responsabilizado (o lo han responsabilizado) dentro de un grupo de aprendizaje cooperativo. Para un verdadero aprendizaje colaborativo, cada miembro del grupo debe ser capaz de asumir íntegramente su tarea y además debe tener espacios para que pueda participar y contribuir individualmente.

D. Habilidades personales y de grupo pequeño

El desarrollo de habilidades de cooperación y trabajo en grupo es uno de los puntos más complejos de este método de instrucción, ya que es necesario enseñar a los alumnos las habilidades sociales necesarias para colaborar.

Las habilidades de trabajo colaborativo son simples, y de hecho estas habilidades están presentes en todas las personas desde que aprenden a ser seres sociales. El problema es que con el paso del tiempo, el marcado individualismo, el sistema educativo actual, etc. hacen que las habilidades necesarias para el trabajo colaborativo se afecten negativamente o simplemente se pierden del conjunto de conductas. Existe un conjunto de comportamientos que son propios de la relación con otros, pero dependen de lo personal, cual es la capacidad del alumno de aceptar la diversidad. La capacidad de respetar su turno, de no presionar a otro para que se haga lo que el desea, etc. son conductas que afectan tanto el funcionamiento como el clima de trabajo que se da al interior de un grupo. En un grupo de aprendizaje cooperativo se tienen dos niveles de trabajo; uno es el desarrollo personal y social de los alumnos el que es útil para la mantención del grupo, y el otro es el logro de aprendizaje de determinados contenidos, que se refiere al trabajo y producto concreto. Para la consecución de ambas metas es importante que el profesor dé a sus alumnos tiempo y espacios de auto observación y discusión, para que éstos puedan analizar el funcionamiento de sus grupos y puedan ver en qué medida están empleando sus habilidades personales y sociales, para el éxito y ayuda a los miembros del grupo de aprendizaje cooperativo; es decir, generar espacios para la coevaluación. Es importante además, que el profesor permita la autoevaluación en sus alumnos, de modo que sean ellos los que se den cuenta si están logrando o no los objetivos tanto personales como grupales que se habían acordado.

Ventajas del aprendizaje cooperativo

En relación a la ejecución de tareas, el aprendizaje cooperativo tiene las siguientes ventajas:

• Logro de objetivos cualitativamente más ricos en contenido, pues reúne

propuestas y soluciones de varias personas del grupo.

• Aumenta el aprendizaje, debido a que se enriquece la experiencia de aprender.

• Aumenta la motivación por el trabajo, puesto que hay una mayor cercanía entre

los miembros del grupo.

En relación a la dinámica grupal las ventajas observadas son:

• Aumenta la cercanía y la apertura

• Mejora las relaciones interpersonales entre personas (etnias, discapacitados,

etc.).

• Aumenta la aceptación de estudiantes con necesidades especiales.

• Aumenta la satisfacción por el propio trabajo.

• Se valora a otros como fuente para evaluar y desarrollar nuevas estrategias de

aprendizaje.

• Se genera un lenguaje común, y se establecen normas de funcionamiento grupal.

A nivel personal las ventajas observadas son:

• Aumento y/o desarrollo de las habilidades sociales.

• Aumento de los sentimientos de auto eficiencia.

• Disminuyen los sentimientos de aislamiento.

• Disminuye el temor a ser observados por otros.

• Disminuye el temor a la crítica y retroalimentación.

• Incentiva el desarrollo del pensamiento.

• Se conocen diferentes temas y se adquiere nueva información.

• Aumenta la autoestima y la integración grupal.

Una ayuda para el trabajo con los alumnos...

Roles en un grupo de aprendizaje cooperativo:

Sintetizador Debe chequear que cada uno de los miembros del grupo aprenda y comprenda lo que se está haciendo y estudiando.

Investigador veloz Debe buscar y recopilar los materiales e información que el grupo necesite, además es el alumno que comunica a su grupo con otros grupos y con el profesor.

Secretario Es el alumno que escribe y/o toma nota de las decisiones del grupo y edita (no escribe todo) el informe final.

Animador Es el alumno que estimula y refuerza las contribuciones de todos los miembros del grupo.

Observador El alumno que debe velar y observar como el grupo está colaborando.

Controlador del tiempo. Es el alumno que se encarga de regular el tiempo de trabajo en el grupo.


Para revisar y profundizar...

• Trabajo Colaborativo. Plan Maestro www.conce.plaza.cl/planmaestro.

htm o en CD de Material de Apoyo.

.

EL APRENDIZAJE COLABORATIVO Y COOPERATIVO

El aprendizaje colaborativo representa una teoría y un conjunto de estrategias metodológicas que surgen del nuevo enfoque de la educación, donde el trabajo cooperativo en grupo es un componente esencial en las actividades de enseñanza-aprendizaje.

Más que una técnica, el aprendizaje colaborativo es considerado una filosofía de interacción y una forma de trabajo que implica, tanto el desarrollo de conocimientos y habilidades individuales como el desarrollo de una actitud positiva de interdependencia y respeto a las contribuciones.

Está fundamentado en la teoría constructivista, el conocimiento es descubierto por los alumnos, reconstruido mediante los conceptos que puedan relacionarse y expandido a través de nuevas experiencias de aprendizaje. Enfatiza la participación activa del estudiante en el proceso porque el aprendizaje surge de transacciones entre los alumnos y entre el profesor y los estudiantes. (Panitz, 1998).

Para obtener éxito del aprendizaje colaborativo se necesita contemplar diferentes factores, entre los cuales se encuentra la interacción entre los miembros del grupo, una meta compartida y entendida, respeto mutuo y confianza, múltiples formas de representación, creación y manipulación de espacios compartidos, comunicación contínua, ambientes formales o informales, líneas claras de responsabilidad. (Kaye, 1993)

La base del trabajo colaborativo es la cooperación y es por ello que frecuentemente se solapan los términos de aprendizaje colaborativo y aprendizaje cooperativo.

Cooperar significa trabajar juntos para alcanzar objetivos compartidos. En las situaciones cooperativas, las personas buscan resultados beneficiosos para sí mismas y para los otros integrantes de sus grupos. El aprendizaje cooperativo es entonces utilizar en la educación grupos pequeños donde los alumnos trabajan juntos para mejorar su propio aprendizaje y el de los demás. Los alumnos además sienten que pueden alcanzar sus objetivos de aprendizaje sólo si los demás integrantes de su grupo también lo alcanzan. (Deutsch, 1962; en Johnson y Johnson, 1999).

Los esfuerzos cooperativos dan como resultado que los participantes reconozcan que todos los integrantes del grupo comparten un destino común. (“nos salvamos juntos o nos hundimos juntos”), para que todos obtengan crédito del esfuerzo de cada uno (“tus esfuerzos me benefician y mi esfuerzo te beneficia”), reconozcan que el desempeño de cada uno es provocado mutuamente por uno mismo y sus compañeros (“en la unión está la fuerza”) y se sientan felices y orgullosos por los logros de cualquier integrante del grupo.


Algunas distinciones entre la cooperación, la competencia y el individualismo

Tabla 1. Comparación de los tipos de aprendizaje: Cooperativo, Competitivo e Individualista ( Johnson,Johnson y Holubec, 1999; Enesco y Del Olmo, 1992 en Díaz y Hernándezz, 2001)

Aprendizaje Cooperativo

Aprendizaje Competitivo

Aprendizaje individualista

Objetivo

Los alumnos trabajan juntos en grupos reducidos para maximizar su aprendizaje y el de los demás.

Los alumnos trabajan comparándose con los demás y con el empeño de lograr la máxima distinción.

Los alumnos trabajan con independencia, a su propio ritmo para lograr metas de aprendizaje personales, desvinculadas de las de los demás alumnos

Esquema de interacción

Los estudiantes estimulan el éxito de los demás, se escuchan y se prestan ayuda.

Los estudiantes obstruyen el éxito de los demás, intentan disminuir su rendimiento y se rehusan a ayudarlos.

Los estudiantes trabajan independientemente y tienen libertad para decidir si ayudan o no a los otros.

Aplicación.

Este tipo de aprendizaje es de amplia aplicación. El facilitador puede promoverlo en cualquier tarea, materia o programa de estudios.

Este tipo de aprendizaje presenta limitaciones con relación a cuándo y cómo emplearlo de forma apropiada.

Su aplicación presenta igualmente limitaciones. No todas las tareas, materias o cursos se prestan para este tipo de aprendizaje.

Evaluación

El facilitador evalúa el trabajo individual del alumno y el trabajo del grupo, de acuerdo a criterios cognitivos y actitudinales.

El facilitador evalúa el trabajo de cada alumno de acuerdo a una norma basada fundamentalmente en el desempeño. Ej. del mejor al peor.

El facilitador evalúa con sus propios criterios el trabajo individual de cada alumno.

Investigaciones realizadas que comparan los métodos de aprendizaje cooperativo y colaborativo, con los métodos individualistas y más competitivos, señalan los beneficios, a favor de los primeros: (Johnson y Johnson, 1989 en Johnson y Johnson, 1999):

1. Mayores esfuerzos por lograr un buen desempeño; esto incluye un rendimiento más elevado y una mayor productividad por parte de los alumnos, mayor posibilidad de retención a largo plazo, motivación intrínseca, motivación para lograr un alto rendimiento, mayor tiempo dedicado a las tareas, un nivel superior de razonamiento y pensamiento crítico.

2. Relaciones más positivas entre los alumnos; esto incluye un incremento del espíritu de equipo, relaciones solidarias y comprometidas, respaldo personal e institucional, valoración de la diversidad y cohesión.

3. Mayor salud mental; esto incluye un ajuste psicológico general, fortalecimiento del yo, desarrollo social, integración, autoestima, sentido de la propia identidad y capacidad de enfrentar la adversidad y las tensiones.

Aprendizaje cooperativo y aprendizaje colaborativo

Diferentes autores han expuesto criterios sobre el aprendizaje cooperativo y más recientemente se refieren al aprendizaje colaborativo, ambos paradigmas están fundados en la epistemología constructivista y por lo tanto son muchos más los aspectos que comparten que los que los diferencian. No obstante Brufée 1995, en Panitz, 1998 señala algunas pequeñas distinciones:

1. En el aprendizaje cooperativo el proceso de enseñanza-aprendizaje va a estar más estructurado deliberadamente por el profesor, hay una estructura predefinida de la actividad, mientras que en el aprendizaje colaborativo se le atribuye mayor responsabilidad individual al estudiante y por lo tanto, la estructura de la actividad tiende a ser más libre.

2. En el aprendizaje cooperativo parece haber mayor énfasis en la tarea, en cambio, en el colaborativo parece haber mayor énfasis en el proceso. La premisa básica del aprendizaje colaborativo es la construcción del consenso a través de la cooperación de los miembros del grupo.


Estructura libre

Aprendizaje

colaborativo

Estructura predefinida Aprendizaje

cooperativo


Énfasis en el Énfasis en la

Proceso tarea.

Componentes esenciales del aprendizaje cooperativo/colaborativo

Johnson, Johnson y Holubec (1999) señalan los siguientes:

1. Interdependencia positiva: la cual existe cuando los estudiantes perciben un vínculo con sus compañeros de grupo de forma tal, que no pueden lograr el éxito sin ellos (y viceversa), coordinando sus esfuerzos con los de sus compañeros para poder completar una tarea, compartiendo recursos, proporcionando apoyo mutuo y celebrando juntos el éxito.

2. Interacción cara a cara, estimuladora: La interacción cara a cara es muy importante porque existe un conjunto de actividades cognitivas y dinámicas interpersonales que sólo ocurre cuando los estudiantes interactúan entre sí en relación a los materiales y actividades, permitiendo la posibilidad de ayudar y asistir a los demás. Este tipo de interacción permite que los estudiantes obtengan retroalimentación de los demás y ejerzan presión social sobre los miembros poco motivados para trabajar.

3. Valoración personal - .responsabilidad personal: El propósito de los grupos de aprendizaje cooperativo es fortalecer académicamente y actitudinalmente a sus integrantes, por lo tanto, se requiere de la existencia de una evaluación del avance personal, la cual va dirigida hacia el individuo y hacia el grupo. Para asegurar que cada individuo sea valorado convenientemente se recomienda:

§ Evaluar cuanto del esfuerzo que realiza cada miembro contribuye al trabajo de grupo

§ Proporcionar retroalimentación a nivel individual así como grupal.

§ Auxiliar a los grupos a evitar esfuerzos redundantes por parte de sus miembros

§ Asegurar que cada miembro sea responsable del resultado final.

4. Habilidades interpersonales y de equipo: Deben enseñarse a los alumnos las habilidades sociales requeridas para lograr una colaboración de alto nivel y para estar motivado a emplearlas. En particular debe enseñarse a los alumnos a:

§ Conocerse y confiar unos en otros

§ Comunicarse de manera precisa, sin ambigüedades

§ Aceptarse y apoyarse mutuamente

§ Resolver conflictos constructivamente

5. Evaluación grupal: Los miembros del grupo necesitan reflexionar y discutir entre sí cuál es el nivel de logro de sus metas y mantenimiento efectivo de relaciones de trabajo, identificando cuáles de las acciones de los miembros son útiles, cuales no, y tomar decisiones acerca de las acciones que deben continuar o cambiar.

Tipos de grupos y roles grupales en el aprendizaje cooperativo

Existen tres tipos de grupos para el aprendizaje cooperativo: el formal, el informal y los grupos cooperativos de base. (Johnson, Johnson y Holubec, 1999)

Los grupos de aprendizaje cooperativo formal duran entre una clase y varias semanas. Se puede estructurar cualquier actividad académica para el aprendizaje cooperativo formal. Los grupos de aprendizaje cooperativo formal aseguran que los alumnos se involucren de manera activa en el trabajo intelectual de organizar el material, explicarlo, resumirlo o integrarlo en las estructuras conceptuales existentes. Son el corazón del aprendizaje cooperativo.

Los grupos de aprendizaje cooperativo informal son grupos ad hoc que duran unos minutos dentro de una clase. Se les utiliza durante la enseñanza directa (explicaciones, demostraciones, ejercicios grupales) para concentrar la atención de los alumnos en los materiales que deben aprender, crear un clima favorable para el aprendizaje, ayudar a establecer expectativas sobre lo que abarcará la actividad, asegurar que los alumnos procesen cognitivamente el material que se está enseñando y proporcionar cierre a una situación educativa.

Los grupos cooperativos de base son grupos heterogéneos, de largo plazo (duran al menos un semestre) y con miembros estables; su objetivo principal es hacer que los integrantes del grupo se ofrezcan entre sí el apoyo, la ayuda y el aliento necesarios para progresar académicamente. Los grupos de base ofrecen a los alumnos relaciones comprometidas a largo plazo.

No existe grupo ideal. La productividad de un grupo no está determinada por quiénes lo integran, sino por la forma en que trabajen juntos. En ciertos casos, se puede recurrir a grupos de aprendizaje cooperativo homogéneos para enseñar determinadas habilidades o para alcanzar determinados objetivos de enseñanza. Pero, en general, es conveniente recurrir a grupos heterogéneos, en los que sus integrantes proceden de diferentes ámbitos, tienen diversas aptitudes, experiencias e intereses, porque de este modo los alumnos:

1. Se exponen a ideas variadas, múltiples perspectivas y diferentes métodos de resolución de problemas.

2. Generan desequilibrios cognitivos, que estimulan el aprendizaje, la creatividad y el desarrollo cognitivo y social.

3. Se involucran en un pensamiento más elaborado, dan y reciben más explicaciones y adoptan con más frecuencia puntos de vista personales para discutir el material. Todo esto aumenta la profundidad de la comprensión, la calidad del razonamiento y la precisión de retención a largo plazo.

En lo referente al arreglo del aula, se sugiere acomodar círculos de trabajo con roles complementarios interconectados y rotativos entre los miembros del grupo: (Johnson, Johnson y Holubec, 1999). Estos roles dependen de la actividad y del tamaño del grupo. El docente puede seleccionar los más apropiados según la situación de aprendizaje.:

§ Un compendiador, que se encargará de resumir las principales conclusiones o respuestas generadas por el grupo.

§ Un inspector, que se asegurará que todos los miembros del grupo puedan intervenir y decir explícitamente como arribaron a una conclusión o respuesta.

§ Un entrenador, que corrige los errores de las explicaciones o resúmenes de los otros miembros.

§ Un elaborador, que tiene como tarea pedir a los integrantes del equipo relacionar los nuevos conceptos y estrategias con el material aprendido previamente.

§ Un investigador-mensajero, que consigue los materiales que el grupo necesita y se comunica con los otros grupos y con el profesor.

§ Un registrador, cuya función es escribir las decisiones del grupo y editar el reporte del trabajo.

§ Un animador, que reforzará las contribuciones de los miembros del equipo.

§ Un observador, que cuidará que el grupo esté colaborando de manera adecuada.

Rol del docente y estrategias para favorecer situaciones de aprendizaje cooperativo /colaborativo.

El rol central del docente es el de actuar como mediador o intermediario entre los contenidos y la actividad constructivista que despliegan los alumnos para asimilarlos. Esto ha conducido a los psicólogos de la corriente sociocultural a plantear que los aprendizajes ocurren primero en un plano interpsicológico (mediado por la influencia de otros) y en segundo plano a nivel intrapsicológico, una vez que los aprendizajes han sido interiorizados, debido al andamiaje que ejercen en el aprendiz aquellos individuos expertos que lo han ayudado a asumir gradualmente el control de sus acciones

Se resumen algunas estrategias que permiten al docente estructurar el proceso de enseñanza para el logro del aprendizaje cooperativo/colaborativo (Díaz y Hernandez, 2001)

1. Especificar los objetivos del curso, de la unidad, de la clase.

2. Tomar decisiones acerca de la conformación, tipo, tamaño de los grupos y acerca de los roles que desempeñarán los estudiantes para asegurar la interdependencia.

3. Planear materiales de enseñanza y estructurar la meta grupal de interdependencia positiva.

4. Explicar la tarea educativa y los criterios de éxito.

5. Monitorear la efectividad de los grupos. Intervenir para proveer asistencia en las tareas, responder preguntas, enseñar recursos e incrementar las habilidades interpersonales del grupo.

6. Proporcionar un cierre, evaluar calidad y cantidad del aprendizaje de los estudiantes y valorar el buen funcionamiento del grupo.

Bibliografía

Díaz Barriga, F. y

Hernández Rojas, G. (2001)

Estrategias Docentes para un Aprendizaje Significativo. Serie Docente del Siglo XXI. Colombia: Mc Graw Hill Interamericana, S.A.

Johnson, D.W. y

Johnson, R.T. (1999)

Aprender juntos y solos. Buenos Aires: Aique Grupo Editor, S.A.

Johnson, D.W. ,

Johnson, R.T. y

Holubec, E.J. (1999)

El Aprendizaje Cooperativo en el Aula.

Buenos Aires: Editorial Paidos.

Kaye, A. (1993)

Technologies for Educational Interaction and Colaboration Institute of Educational Technology, United Kingdom: Open University

Panitz, T. (1998)

Si, hay una gran diferencia entre el Paradigma del Aprendizaje Cooperativo y el del Aprendizaje Colaborativo. Traducido por E. Gajón con permiso del autor.: I.T.E.S.M. Campus Laguna

(en línea) Disponible en

www.lag.itesm.mx/profesores/servicio/congreso/documentos/

(Enero, 2002)